Las operaciones en invernaderos tienden a simplificar los procesos, lo que suele llevar a una reducción de la biodiversidad. Sin embargo, al aumentar la diversidad, tanto en la superficie como en el suelo, un invernadero puede mejorar su productividad y rentabilidad. Imagina una variedad de cultivos de cobertura y pastoreo, ¡incluso dentro del invernadero!